Los Red Hot Chili Peppers (o Red Hot para acortar) son una de las bandas que más me marcaron a lo largo de mi juventud con grandes temazos como Otherside, By the Way o Snow, tienen muchos otros pero esa fue la época en las que los pille yo.
El grupo es original de California, según la wikipedia tocan Funk Rock y Rock Alternativo, yo no me siento capaz de etiquetarlos porque cada canción para mi es un mundo. En lo que si estoy de acuerdo es que el gran album que los lanzó al estrellato fue «blood, sugar, sex and magik» en 1991 con las fantásticas Suck my kiss o Give it away entre otras.
Con todo ello en mente, intenté descubrir como era la comida típica de California… sin ningún resultado, ya que al ser una ciudad nexo de unión de un sin fin de culturas tienen comida de todas partes pero nada que puedas considerar como «su plato típico» lo que me impide usar sus orígenes como inspiración para la hamburguesa y me deja solo su música.
Una Red Hot Chili Peppers tiene que tener chiles rojos picantes, sin duda, aún que sea lo único que tenga, ¿pero que más?, pues bien basándonos en ese gran disco que les hizo famoso pensé que podía usar morcilla (blood), azúcar (sugar), Ginseng (Sex) y carne de conejo (magik).
La primera versión estaba bien, mezcle la morcilla con la carne de conejo para hacer la hamburguesa e hice una reducción de infusión de Ginseng que es un potente afrodisíaco natural con azúcar y los chiles, todo acompañado de mezclum de lechugas en la base y el logo del asterisco hecho a base de mozzarella y tomate cortado en esa forma.
El resultado era llamativo, pero mejorable, concretamente la reducción de ginseng estaba muy forzada en la mezcla y no pegaba nada, al igual que el azúcar no aportaba nada más que ocultar el sabor de la infusión, hasta que llegó la época de la maracuyá también conocida como fruta de la pasión, mucho más adecuado para ser el sex de la formula tanto por no tener que explicar que tiene que ver el ginseng con el sexo como por lo bien que combinaba con los chiles en la salsa. El toque dulce lo sustituí también por miel, que siendo otro tipo de azúcar ligaba mucho mejor con la salsa y conseguía la versión final de la hamburguesa por ahora, porque siempre se podrá mejorar, pero esta vez el sabor si que es digno del grupo que representa.
Actualización
Después de mucho pensarlo he sacado la versión 3.0 de la hamburguesa en la que la sangre deja de ser sangre de verdad para usar naranjas sanguinas, mucho más fáciles de ligar en una salsa con la fruta de la pasión y la miel en una salsa muy fresca y dulce que hace un gran contraste con el chile rojo y aplaca el exceso de picante de los pimientos.
Y con esto yo creo que ya sí que puedo dar por terminada mi versión de los Red Hot Chili Peppers, con una salsa fresca que combina dulce, ácido y picante y casa perfectamente con la hamburguesa de conejo, la mozzarella y el tomate son obligatorios para el logo y no restan sabor al resto de ingredientes.
Lo único malo es que la fruta de la pasión y la naranja sanguina son frutas temporales de Invierno, lo que hace muy difícil por no decir imposible realizar esta hamburguesa en Verano… ¡Mi spiace Eleonora!
Tiempo de preparación | 20 minutos |
Tiempo de cocción | 20 minutos |
Raciones |
hamburguesa
|
- 2 Hamburguesas de carne de conejo
- 2 Pimientos tipo Chile Rojos
- 1 Naranja Sanguina exprimida
- 1 cucharada Miel
- 1 Fruta de la pasión en zumo
- 1 Tomate
- 2 loncha Mozzarella
- 2 Panecillos de hamburguesa
Ingredientes
|
|
- Lo primero es hacer la salsa, saca todo el contenido de la maracuyá y bátelo junto con la miel y la naranja sanguina exprimida.
- Limpia de pepitas y rabo los chiles y pícalos muy finos. Pon la salsa a cocer a fuego medio y añadele los chiles picados. Ve dejando reducir mientras remueves de vez en cuando.
- (Opcional) Si la salsa no espesa o la quieres más densa puedes añadirle azúcar al gusto.
- Haz la hamburguesa de conejo normal, en sartén o plancha a tu gusto y monta la hamburguesa siguiendo este orden: Pan, brotes de lechuga, Hamburguesa, cucharada de salsa, queso mozzarella y tomate. Deja la tapa de la hamburguesa al lado para que se aprecie el logo en la presentación
Hay otra versión si cabe más fresca que es haciendo el logo en negro, para ello cambia la mozzarella y el tomate por una rodaja de remolacha y fresas.
El corte de las fresas es más difícil, pero el resultado merece la pena.